Funciones básicas de un almacén. ¿Qué saber?

El uso de un almacén es habitual por parte de autónomos, profesionales y pymes en el día a día de su actividad empresarial. Pero, antes de contratar el alquiler almacén o la compra del mismo, es importante conocer las funciones básicas de un almacén para determinar si es lo que la empresa o profesional necesita para su negocio.

¿Cuándo utilizar un almacén?

Una de las preguntas más importantes a resolver al respecto es cuándo utilizar o no un almacén. Para ello es importante conocer las funciones del área de almacén y ver si alguna o algunas de ellas es justo lo que necesita tu empresa. Puedes necesitar alquilar un almacén para la conservación de productos y mercancías, para utilizarlo como punto de control y expedición de las mismas o como lugar en el que recibirlas antes de trasladarlas hacia otro punto.

Los almacenes son utilizados por autónomos y profesionales para guardar sus herramientas de trabajo y maquinaria, pero también por empresas que necesitan un espacio extra en el que almacenar sus existencias mientras que llega el momento de enviarlas a sus clientes. La gestión de inventarios y almacenes es fundamental en cualquier empresa, incluso en las pequeñas.

Funciones básicas de un almacén

Entre las funciones básicas de un almacén podemos destacar las siguientes:

Recepción de mercancías

Una de las funciones del área de almacén consiste en dar entrada a las mercancías que los proveedores envían a la empresa. Pueden ser productos terminados que la empresa va a comercializar o materias primas que luego van a ser incorporadas en un proceso de producción de la empresa.

Almacenamiento

Es una de las funciones básicas de un almacén y el que le da nombre al mismo. El almacén se puede utilizar para almacenar mercancías para tenerlas fácilmente al alcance cuando sean necesarias. Una forma de tener existencias que el negocio utiliza en su día a día.

Mantenimiento y conservación

La conservación de las mercancías dentro del almacén es otra de sus funciones básicas. Las mercancías tienen que conservarse y mantenerse respetando la legislación correspondiente y de forma totalmente segura, especialmente cuando hablamos de alimentos o productos perecederos.

Gestión de inventarios y existencias

La gestión de inventarios y almacenes es una de las funciones básicas de un almacén. Consiste en determinar qué cantidad almacenar de cada producto, controlar la frecuencia con la que rotan para, así, determinar cada cuánto y qué cantidades comprar de cada una de ellas. Es una forma de reducir los costes de almacenamiento.

Expedición de mercancías

La expedición de mercancías desde el almacén hasta su destino, con el embalaje de la misma y su introducción en el medio de transporte, es otra de las funciones de un almacén.

Como has podido observar con la lectura de este artículo, son numerosas las funciones basicas de un almacén. Si crees que tu negocio necesita este tipo de espacio para fortalecer su actividad, solo tienes que contactar con Trastering para encontrar la solución que mejor se adapte a las necesidades de tu empresa.

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